Hay días como hoy, en los que me levanto y pienso "Hoy va a ser un buen día" pero se me olvida lo rápido que cambio de idea a medida que van pasando las horas. Entonces me pregunto ¿llegaré a un punto donde haya un cartel que diga cambio de sentido o simplemente seguiré vagando hasta caer en el abismo?
Menos mal que este fin de semana tengo Fórmula Uno y veintemil cosas por hacer y leer. Así consigo mantener la cabeza ocupada en muchas cosas y no la dejaré pensar, el inconveniente a todo esto es que no tenga ganas de hacer todo aquello y prefiera seguir martirizándome. Creo que este año me constará mucho estar bien cuando llegue el 6 de abril, lo deduzco porque aún quedan un par de semanas para esa fecha y desde hace tiempo estoy mal, para ser más exacta desde antes de Navidades (en esas fechas caí y luego me levanté), así que ese día creo que intentaré sacar la sonrisa más falsa que tenga y reírme, aunque por dentro me esté rompiendo en pedazos cada vez más pequeños mientras caen lágrimas invisibles para el resto de las personas.
Espero que algún día pueda decir que la canción Livin' In A World Without You de The Rasmus describe mi liberación, pero por ahora, solo puedo soñar con ese momento.
...You told me my darling
Without me you're nothing
You taught me to look in your eyes
And fed me your sweet lies
Suddenly someone was there in the window
Looking outside at the sky that had never been blue
Oh there's a world without you
I see the light
Living in a world without you
Oh there is hope to guide me
I will survive
Living in a world without you...
Livin' In A World Without You, The Rasmus
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